Actualizado 16 octubre, 2021
Los números romanos son parte de un sistema de numeración que se desarrolló en la Antigua Roma e incluso en la época del imperio. Es un sistema que emplea algunas letras mayúsculas como símbolos para representar valores.
A continuación, en consonancia, presentamos números romanos: reglas de uso, tablas, juegos y más información.
Contenidos del artículo
Reglas y uso de los números romanos
Desde niños aprendemos que el sistema romano de numeración no tiene mucha relación con el decimal que usamos. El segundo es claramente posicional, el primero en un inicio fue simplemente aditivo (copiado de los etruscos, una civilización cercana a Roma) y luego evolucionó con rasgos sustractivos.
Si bien su uso en la actualidad ha mermado, a continuación presentamos las reglas más esenciales para entender y utilizar el sistema de numeración romano. Aquí esgrimimos la notación moderna:
- Los números se leen de izquierda a derecha empezando con los símbolos de mayor valor o conjunto de símbolos.
- Un símbolo seguido de otro de igual o inferior valor suma. Un ejemplo evidente: XXI es igual a 21.
- Un símbolo seguido de otro de mayor valor resta. Un buen ejemplo: IV, que es igual a cuatro.
- Un símbolo seguido de otro de mayor valor hace que ambos formen un conjunto en el cual debe restarse el valor del primero al valor del siguiente. Un ejemplo claro: XIX se entiende como 10 +(1-10)=19.
- La unidad (I) y los números con base 10 (X, C y M) pueden repetirse hasta tres veces consecutivas como sumandos.
- Los números con base 5 (V,L y D) no pueden repetirse seguidos, ya que la suma de esos símbolos tiene ya representación en los símbolos anteriores.
- Los símbolos con base 5 no pueden utilizarse para restar. Por eso 45 no puede escribirse VL, sino XLV (podemos pensarlo como la suma de 50 y 5, para luego restar 10).
- La unidad y los símbolos con base 10 pueden estar restando antes de un símbolo de mayor valor, pero hay dos aclaraciones: solo pueden restar sobre los símbolos de base 5 y 10 de un valor inmediatamente superior (por ejemplo sí IX, pero nunca IL) y en la sustracción no puede haber repetición del símbolo sustractivo.
Tabla de símbolos romanos
Los números romanos, al igual que el sistema decimal, muestran la economía sígnica porque de un número reducido de elementos se pueden desarrollar una enorme cantidad de resultados. A continuación mostramos una tabla simple con los símbolos romanos.
Sin la voluntad de complejizar excesivamente todo, lo cual necesariamente debe tener una relación con su uso, hay que decir que se pueden obtener números aún más grandes que lo que muestran las tablas y sus combinaciones, según las reglas.
Con valores iguales o superiores a 1.000 se emplaza encima del número una línea horizontal. Indica que la base de la multiplicación es por 1.000. Asimismo, una doble raya sería por un millón y así añadiendo rayas horizontales sobre las letras se encontrarían números romanos de mayor envergadura.
Números romanos del 1 al 1000
La tarea de aprender números romanos en un inicio puede ser sencilla, pero es lógico que conforme los números sean mayores todo se vuelva algo más complejo. A continuación, por tal motivo, presentamos números romanos en una tabla completa que va de 1 a 1000.
Ideas y juegos con números romanos
Una maravillosa forma de aprender siempre será la que nos permite el mismo juego, la diversión y, por supuesto, los números romanos no escapan a semejante pedagogía del disfrute (tanto para niños como para adultos).
Por lo tanto, a continuación se presentan una serie de juegos que se pueden hacer con los mismos números romanos. Los mismos versan en unir números, completar frases a partir de los números, entre otros.
Usos actuales de los números romanos
Una de las preguntas más frecuentes sobre el sistema de numeración romana en la actualidad es para qué sirve. Y por supuesto, lo decimos de una buena vez: no es simplemente una reliquia de la antigüedad, ya que en el presente haya los más variados usos. A continuación se enumeran algunos:
- En el conteo de los siglos, como cualquiera puede percibir.
- En números de fechas, que muchas veces se emplazan en números romanos.
- En los relojes (sí, algunos de ellos pueden tener la hora marcada no en números decimales, sino en romanos).
- En los títulos de nobleza, como forma para demarcar la diferencia entre distintos miembros que usaban el mismo nombre.
- Lo mismo pasa con la utilización de los números romanos en caso de los papas.
- En los actos y escenas de una obra de teatro.
- Aunque no siempre, también pueden aparecer en los capítulos de los libros, a modo de organización interna.
- En la designación de congresos, olimpiadas, asambleas y certámenes.
- En la designación de segundas partes de películas y así sucesivamente.
- Por supuesto, distintas ciencias utilizan los números romanos por diversos motivos: en astronomía a veces se designan las lunas o satélites de un planeta con números romanos, en química sirven para denotar los grupos de elementos en la tabla periódica y las unidades militares también los pueden presentar.